Resguardos o makutos de Palo Monte
¿Qué es un makuto?
Los amuletos, makutos o resguardos de Palo Monte son objetos mágicos que se utilizan para proteger a sus dueños de las malas energías y atraer las positivas. Cada makuto es único y se confecciona exclusivamente para una persona, a partir de sus datos personales y del signo obtenido en su registro con chamalongos.
¿Cómo se hacen los makutos?
Los makutos -vocablo kikongo que significa bulto, fardo o envoltorio- se preparan en una tela con la firma o símbolo del signo dibujada por una de sus caras. Sobre ella se colocan los datos de su futuro propietario y los ingredientes señalados por los nfumbes o espíritus en su registro. Estos ingredientes pueden ser:
Ralladuras de ciertos palos o árboles sagrados, tierra o rastro de lugares positivos, limallas de varios metales, fragmentos de ámbar, cuarzo y coral, imán hembra para atraer, espejo para repeler, azogue para darle vitalidad al amuleto, rastro de la nganga o altar, etc.
Los makutos se envuelven hasta lograr un pequeño y apretado bulto que debe caber en una mano.
El makuto terminado se consagra con mamba o agua de río mezclada con yerbas y flores de los mpungus o divinidades de cabecera de la persona. También se le ofrecen tabaco y aguardiente de caña, entre otras sustancias. Después, se deja secar sobre la nganga o altar para imbuirlo de su poder espiritual. Algunos paleros también lo entierran varios días a la sombra de una ceiba o jagüey con el mismo propósito, antes de entregárselo a su dueño.
¿Cómo se utilizan los makutos?
Los makutos, también llamados nchilas o ndilangas, pueden ocultarse dentro de pequeñas figuras de cerámica o madera, güiras o semillas secas, saquitos de cuero, puntas de cuerno, etc. Se pueden portar discretamente como colgantes, adornos y llaveros. Los dueños no deben separarse nunca de sus makutos cuando salgan de casa, especialmente en viajes y circunstancias importantes en que más suerte se precisa, como entrevistas de trabajo, trámites legales, tratamientos médicos, competiciones, citas románticas, etc.
Si el makuto se pierde o se rompe hay que consultar con los chamalongos sin demora para averiguar el significado espiritual de lo ocurrido.
Los makutos se van debilitando a medida que absorben las energías negativas que circundan a sus dueños y por esa razón es conveniente alimentarlos o recargarlos cada tres o cuatro meses untándoles aceite de palma y manteca de cacao, rociándoles aguardiente de caña y humo de tabaco, y dejándolos descansar a la luz de una vela roja durante toda la noche hasta el día siguiente; cuando ya se pueden limpiar y volver a usar como habitualmente.
¿Qué beneficios puedo esperar de un makuto?
Un makuto bien confeccionado y consagrado puede ofrecer una serie de beneficios, como:
-Protección contra las malas energías y el mal de ojo.
-Atracción de las energías positivas, la suerte y la prosperidad.
-Ayuda para alcanzar los objetivos personales.
-Fortalece la autoestima y la confianza.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que su efectividad depende de la fe y la creencia de la persona que los porta.
Cuatro makutos terminados. Cada uno es una pieza única. La carga o ingredientes se envuelve con tela e hilo y se sella con resina natural